El gran teatro

Lamentable, vergonzoso, indignante. Me faltan adjetivos para referirme a esta “asociación” que se supone que lleva por bandera a niños con un trastorno específico. Orgullosos salen en periódicos vendiendo una mentira que todos nos creemos a pies juntillas. Y los que no se lo creen, se callan porque perciben un salario que les mantiene contentos.

El estallido de rabia a surgido después de conocer el paradero de dos niños de esta asociación. Dos niños que según los profesionales del centro eran considerados como “agresivos”. ¿Cuál es la solución más “humana”? Deshacernos de ellos. Todos felices, contentos y con una nómina (los que la tienen, porque tampoco es que sean muy amigos de la legalidad). ¿Pero de verdad están haciendo una buena labor? ¿Son verdaderos profesionales? Lo dudo tanto...

Deshacerse de dos niños de 14 y 16 años, derivándolos a el centro psiquiátrico Santa Isabel y a el Sagrado Corazón respectivamente, no me parece ser buenos profesionales.
Son unos hipócritas que sé dedican a recaudar dinero metiéndonos trolas como la campaña en la cual recaudaban dinero para la equinoterapia, pero... lo que no han dicho que de esa terapia sólo se benefician dos niños, y no hay cabida a más (ni habrá). Entonces... ¿Dónde va el dinero qué tanto se esfuerzan por conseguir? Yo diría que un 10% va destinado a los niños (tengo que decir que no es un dato contrastado, pero muy aproximado para mi parecer)
Invierten el dinero suficiente para dar buena imagen y deshacerse de los “problemas”.
No hay vocación, no hay valentía, no hay ilusión. Hay ganas de lucrarse.

El problema no sólo reside en los llamados “responsables”sino en todos aquellos “profesionales“ bisoños que saben lo que pasan y mantienen sus bocas cerradas. Tiene tanta culpa el que mata como el que tira de la pata.

Queridos inversores, ¿Queréis “regalar” dinero? Hay muchas más asociaciones que de verdad se mueven y defienden lo que tanto proclaman. Estáis alimentando a víboras sedientas de dinero, que nunca se conforman y buscan más, y no os engañéis, no buscan más para los niños, buscan más para ellos. Buscan una foto en el periódico, un premio por la“intensa labor en el desarrollo educativo y la mejora de la calidad de vida ” que resulta ser una burda quimera.
Una sarta de patochadas que nos entran con vaselina por la puerta de atrás y todos sonreímos porque visten de hipocresía imágenes de niños con un trastorno con el que hay que trabajar, no lucrarse ni deshacerse de ellos.

Y yo me pregunto ¿Siempre ganan los mismos? Sois vergonzosos, si queréis sacar dinero montar un taller de coches, no una asociación.